La casa está situada en Sant Andreu de Llavaneres, en una de las zonas más altas de la urbanización, por lo que goza de preciosas vistas al mar y de total privacidad. La fachada principal y la piscina están orientadas a sudeste gozando de luz natural todo el día. Accedemos a la casa por una gran entrada presidida por un olivo centenario, formando una pequeña plaza que da paso a la entrada principal de la casa y a la entrada del garaje, situado en un anexo colindante. Accedemos a la vivienda por un distribuidor iluminado por un ventanal de techo que da paso a un aseo de cortesía y al gran salón comedor con chimenea, que nos sorprende por sus vistas a la gran piscina desbordante, situada en el mismo nivel y por la vegetación que se vislumbra por los grandes ventanales.
A continuación encontramos una amplia y preciosa cocina con una península con encimeras de mármol blanco y armarios lacados en blanco, con grandes ventanales desde los cuales se accede igualmente directamente a la piscina y al jardín y desde la que se puede disfrutar de vistas al mar. En anexo a la cocina hay un lavadero con salida directa a la parte trasera del jardín. Desde la cocina se da paso a la sala familiar la cual tiene acceso asimismo a la zona de la piscina. Todos los ventanales de estas estancias se esconden dentro de los muros, por lo que en verano el interior y el exterior de la vivienda se confunden en un mismo espacio. Tanto el suelo del interior como del exterior es de la misma piedra caliza blanca.