Las bodas campestres se han convertido en tendencia desde hace años. No todas las parejas buscan grandes salones, playas o grandes fincas si no que algunas prefieren ambientes rurales o campestres, rodeados de naturaleza y grandes espacios verdes, lo cual proporciona mucho encanto a la celebración.

Celebrar una boda campestre no tiene porqué restar lujo y elegancia al enlace. Cada vez más parejas apuestan por salirse del molde y realizar este gran evento igual de romántico y divertido en el campo, ya sea al aire libre o en un espacio interior completamente rústico con elementos de madera y piedra.

¿Por qué organizar una boda en el campo?

Cada vez más parejas se decantan por celebrar una boda campestre, ya que en ellas se puede unir el encanto y el romanticismo que sólo puede ofrecer la naturaleza. Además, supone una de las mejores opciones para escapar de la ciudad y las rutinas diarias encontrando una alternativa perfecta para una gran celebración en un entorno idílico.

Una de las principales razones por las que celebrar una boda en el campo es porque se trata de una de las mejores maneras de disfrutar de la naturaleza y todo lo que aporta: aire libre y fresco, cantos de pájaros y un ambiente soleado repleto de tranquilidad. Esto supone que la boda tenga lugar en un ambiente más relajado y donde no importa el número de invitados ya que no hay aforo.

Además, los colores que ofrecen las plantas y los árboles proporcionan una luz inimitable para conseguir unas fotografías perfectas. Además, por la noche, gracias al uso de farolillos se puede crear una atmósfera imposible de crear en la gran ciudad.

Incluso, si lo prefieres, puedes contar con carpas si hace muchísimo calor o para evitar la lluvia inesperada. Además, una celebración al aire libre permite disponer de entretenimiento para los invitados, especialmente para los niños que pueden correr y jugar sin ninguna preocupación.

Cosas a tener en cuenta en una boda campestre

Como en todos los eventos, existen una serie de factores que hay que tener en cuenta para celebrar una boda campestre y que sea todo un éxito y un gran día para recordar tanto para los novios como para los invitados.

Vestidos para la ocasión

En estos casos, la novia suele optar por vestidos cómodos y sencillos de estilo vintage o bohemio, con telas vaporosas como algodón y seda y caída decorado con detalles de encaje. También suelen utilizarse zapatos cómodos sin tacón de aguja ya que puede hundirse en la arena o el césped o ser incómodos para andar sobre suelos empedrados. Como la mayoría de los vestidos de novia suelen ser blancos puros, aunque también se puede optar por tonos arenosos o diferentes tipos de blancos.

Los invitados pueden elegir el look que deseen dentro de la temática del evento donde prime la comodidad. En estos casos, lo mejor es evitar los brillos excesivos, lentejuelas y colores brillantes o metálicos, así como los colores negros o tonos muy oscuros. La mejor opción es optar por tonos vivos propios de la naturaleza o nude. Igualmente, no es muy recomendable utilizar tacones de aguja debido al terreno de un entorno rural.

La decoración perfecta

Como en cualquier boda, la decoración es uno de los elementos más importantes, al igual que la iluminación. Puesto que probablemente sea una boda al aire libre, si se celebra por la noche, es importante que todos los rincones de la celebración estén completamente iluminados. Por supuesto, se puede jugar con la intensidad proporcionando mayor iluminación a un sitio que a otro.

decoración de boda campestre

En este caso, se emplean arreglos florales, guirnaldas de flores y luces, farolillos y lámparas colgantes. Tanto las mesas como las sillas y demás elementos suelen ser de madera, al más estilo rústico, con una decoración sofisticada y sencilla. Suelen usarse mobiliario fabricado en mimbre, palets, canastas o escaleras fabricadas en madera si fuese necesario su uso.

Los colores que mejor se ajustan a este tipo de celebraciones son los tonos pasteles, rosados, blancos y dorados. Los tonos terrosos, amarillos o escarlatas también encajan a la perfección con la madera y el verdor de todo el espacio.

Elegir el lugar adecuado

Organizar la boda de tus sueños depende de muchos aspectos que hay que tener en cuenta. Lo más importante es encontrar el lugar adecuado para celebrar una boda campestre. No todos los lugares permiten organizar un enlace de estas características. Además, dependiendo de si se trata de una boda de día o de noche los requisitos necesarios para encontrar un lugar variarán. Para ello, es importante que el lugar o la finca elegida disponga de un gran espacio al aire libre donde poder reunir a los invitados, preparar la ceremonia y el banquete.

Las bodas campestres se pueden realizar en haciendas, hoteles rústicos o en fincas ubicadas en las afueras de la ciudad rodeadas de bosques y jardines. Además, dependiendo de dónde se sitúe el lugar, es posible que sea necesario disponer de alojamiento para los invitados, especialmente si vienen de otra ciudad.

Wedding planner para la organización de una boda campestre

Una boda debe ser recordada como uno de los días más importantes para la pareja con todos los detalles cuidados al máximo y sin imprevistos.

En Eventos BCN nos encargamos de organizar todo tipo de bodas. Nuestro equipo de Wedding Planner en Barcelona se encargará de todos los mínimos detalles para que en un día tan especial como este todo esté perfectamente organizado y que los novios os olvidéis de todo para únicamente disfrutar rodeados de familiares y amigos.

Igualmente, nos encargamos de la organización de bodas en Formentera, Ibiza, Mallorca y Girona. Como wedding planners, te ayudaremos en el diseño, planificación y coordinación integral de vuestra boda: elección del lugar de celebración, decoración, estilismo, música, fotógrafo y catering.

Disponemos también de casas, fincas, masías o villas para organizar una celebración rodeados de naturaleza, alejados de las grandes ciudades consiguiendo un ambiente íntimo e informal.

Si estáis buscando un wedding planner, podéis contactar con nosotros y te ayudaremos a organizar el día más importante de vuestras vidas.